La mujer, como la luna, es cambiante.

Esta continua transformación encierra una sabiduría profunda de los ritmos y ciclos de la vida.

Para conectar con esta sabiduría hay que pararse a sentirla, a sentirse. Más allá de los ritmos que impone la sociedad, hay una llamada interna a seguir un ritmo instintivo, no pautado.

Este ritmo natural tiene su sentido; es nuestra forma de vivir en consonancia con la naturaleza. Cuando desoímos esta llamada interna y no respetamos nuestro ritmo, poco a poco nos vamos agotando, desarmonizando, tensando…

Este Taller es una invitación para explorar el ritmo natural y aprender a descubrir tu propio ritmo, nuestras fuerzas instintivas internas que sostienen nuestros diferentes momentos. 

Cuando conozco mis cualidades de cada fase y cómo las vivo yo, puedo hacerme la vida fácil fluyendo con mis mareas en vez de luchas contra las olas.

Por otro lado, al contrario de lo que tenemos integrado, el dolor en la menstruación nos manda mensajes. A través de respetar nuestros ciclos, y de determinadas prácticas, podemos minimizar o eliminar el dolor disfuncional de esta fase.

También daremos una visión diferente a la sangre menstrual y a la menopausia, a día de hoy aún estigmatizadas.

Es quizás el Taller que me hubiese gustado recibir en un momento más temprano de mi vida. Nunca es tarde para conocer,  integrar y valorar aspectos esenciales de nosotras.

Si quieres leer más sobre esto, date una vuelta por Naturaleza Cíclica en una sociedad lineal.

Paloma Godoy